El acerollo o azarollo (Sorbus domestica) es un árbol frutal, que puede alcanzar entre 10 y 20 metros, y es muy apreciado tanto por sus frutos como por su madera. También conocido como serbal de los cazadores o serbal de campo, debido a la tradición de su cultivo y a la utilización de sus frutos para la elaboración de bebidas alcohólicas
Las hojas del azarollo son compuestas, es decir, formadas por varios foliolos. Tienen una forma elíptica u ovalada y están dispuestas de manera opuesta en las ramas. Cada hoja está compuesta por 7 a 15 foliolos. Son de color verde oscuro en la parte superior y más pálidas en el envés, con una textura suave y dentada en los márgenes. En otoño, las hojas se tornan amarillas o rojas, añadiendo un toque ornamental al árbol.
Las flores del azarollo son pequeñas y de color blanco-rosado, y aparecen entre abril y mayo, antes de que se desarrollen las hojas.
Los frutos del azarollo son las azarollas, Tienen un tamaño de 2 a 4 cm de diámetro y una piel dura, con un color que varía de verde a amarillo a marrón cuando maduran, dependiendo de la variedad. Su sabor es inicialmente agrio y algo astringente, pero se vuelve más dulce y sabroso a medida que los frutos maduran.
La madera del azarollo es dura, densa y muy resistente, ideal para fabricar instrumentos de precisión (como la fabricación de mangos de herramientas) y torno debido a su dureza y durabilidad.
El azarollo juega un papel importante en los ecosistemas de zonas montañosas y boscosas, ofreciendo alimento a aves y mamíferos a través de sus frutos.